Es fundamental el autocuidado durante los procesos de reproducción asistida, recordando que la búsqueda de un embarazo siempre involucra a dos, excepto en los casos monoparentales.
Es clave que ambos participen activamente de manera congruente poniendo todos los factores a sumar; mentales, físicos y emocionales.
En la parte física, hay que tener en cuenta:
- Hacer ejercicio 3 veces por semana, 30 minutos cada vez.
- Dormir bien, por lo menos 7 horas diarias.
- Caminar ojalá a diario y preferiblemente en contacto con la naturaleza.
- evitar el consumo de tabaco, alcohol o drogas.
- Alimentación estilo Mediterraneo. Cada vez existe más evidencia científica de que las mujeres que consumen una dieta rica en verduras, frutas, legumbres, pescado y aceite de olivas como fuente principal de grasas, logran más fácil un embarazo. y en los hombres, con este tipo de alimentación se ha evidenciado mejoría en la movilidad de los espermatozoides.
En la parte emocional:
- Evitar el estrés. implementar prácticas como meditación, yoga, bailar, es decir, actividades que producen gozo y tranquilidad mental.
- Pensar muy bien antes de compartir con familiares, amigos o conocidos que vas a realizar un tratamiento de reproducción asistida, pues resulta muy frecuente que termine sumándose la ansiedad y angustia de los otros y esto no va a favorecer tu tratamiento.
- Sanar experiencias del pasado que hayan tenido que ver con el deseo de tener un hijo. tratamientos anteriores, pérdidas inducidas o espontáneas.
- Lo más importante, es que estén conscientes de lo que están buscando: un hijo en casa.
En la parte mental:
- Eliminar pensamientos de culpa, de recriminaciones, como por ejemplo; si hubiera hecho esto antes, se me pasó el tiempo…etc.
- Evitar compartir información de su tratamiento con personas que desconozcan los procedimientos para evitar pensamientos de otros que no aportan en nada para sus deseos de ser padres.
- En términos generales cuidar que los pensamientos, los sentimientos, las palabras y las acciones estén en la misma dirección, siendo congruentes con querer tener un hijo.