Cuando se busca tener un bebé, muchos factores pueden influir en el camino hacia la concepción. Para algunas personas, las enfermedades autoinmunes pueden ser una de las dificultades a superar, ya que estas alteran el funcionamiento normal del cuerpo.
Las enfermedades autoinmunes son condiciones en las que el sistema inmunológico “ataca” por error las células y tejidos sanos del cuerpo, lo que genera una serie de complicaciones a nivel general, y, en particular, en la fertilidad.
Esta condición afecta tanto a hombres como a mujeres, pero su impacto en el sistema reproductivo femenino puede ser más complejo debido a la influencia que tienen en los niveles hormonales y en el funcionamiento de los órganos reproductivos. Las mujeres que viven con estas enfermedades pueden experimentar dificultades adicionales al intentar concebir, sin embargo, es importante reconocer que con el tratamiento adecuado, es posible lograr un embarazo.
El reto para quienes padecen alguna de estas condiciones radica en la alteración del equilibrio hormonal. Las enfermedades autoinmunes pueden afectar órganos clave como los ovarios, la tiroides y el útero, entre otros, lo que dificulta el proceso reproductivo. Es fundamental comprender que cada enfermedad autoinmune tiene un efecto único sobre el cuerpo, por lo que el enfoque para tratar la infertilidad en estas personas debe ser cuidadosamente personalizado.
En el contexto de la fertilidad, no todas las enfermedades autoinmunes tienen el mismo impacto, por lo que es crucial conocer cómo cada una puede interferir con la capacidad de concebir. A continuación, exploramos algunas de las enfermedades autoinmunes más comunes y su relación con la fertilidad, siempre recordando que el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden mejorar significativamente las posibilidades de embarazo.
Enfermedades autoinmunes y fertilidad: ¿cómo se relacionan?
Como lo mencionamos anteriormente, el efecto de las enfermedades autoinmunes sobre la fertilidad está relacionado con el impacto que tienen en el equilibrio hormonal. Las hormonas juegan un papel crucial en la regulación del ciclo menstrual, la ovulación y la capacidad del cuerpo para llevar adelante un embarazo. Las enfermedades autoinmunes pueden alterar este equilibrio, lo que hace que concebir sea más desafiante.
Lupus y su impacto en la fertilidad
El lupus eritematoso sistémico (LES) es una enfermedad autoinmune que puede afectar a varios órganos del cuerpo, incluidos los riñones, el corazón y, en ocasiones, los órganos reproductivos. Las mujeres con lupus tienen un mayor riesgo de experimentar complicaciones durante el embarazo, como preeclampsia o partos prematuros. Sin embargo, con el manejo adecuado de la enfermedad y el control de la actividad inflamatoria, muchas mujeres con lupus logran llevar adelante un embarazo saludable.
El lupus también puede afectar la fertilidad de forma indirecta. Algunos estudios sugieren que los anticuerpos generados por esta enfermedad pueden interferir con la implantación del embrión en el útero. A pesar de estos retos, con un enfoque adecuado, las mujeres con lupus pueden ser capaces de concebir y llevar adelante un embarazo con éxito.
Artritis reumatoide: la influencia en la fertilidad
La artritis reumatoide es otra enfermedad autoinmune que puede tener un impacto en la fertilidad femenina. Esta enfermedad causa inflamación en las articulaciones, pero también puede afectar otros sistemas del cuerpo, incluidas las glándulas que producen hormonas reproductivas. Aunque la artritis reumatoide no suele causar infertilidad directa, los tratamientos utilizados para controlar la enfermedad, como los medicamentos inmunosupresores, pueden interferir con la función hormonal, la ovulación y la reserva ovarica.
Es importante tener en cuenta que el control adecuado de la enfermedad, a través de medicamentos y terapias personalizadas, puede mejorar las probabilidades de embarazo en mujeres con artritis reumatoide.
Celiaquía: el efecto sobre la fertilidad
La celiaquía es una enfermedad autoinmune que afecta el sistema digestivo, pero sus repercusiones también pueden extenderse al sistema reproductivo. Las personas con celiaquía tienen una respuesta inmunológica a la proteína gluten, lo que provoca daño en el intestino delgado. Este daño intestinal puede interferir con la absorción de nutrientes esenciales, lo que a su vez puede afectar la fertilidad. Además, las mujeres con celiaquía no tratada pueden tener un mayor riesgo de complicaciones en el embarazo, como abortos espontáneos.
Al igual que con otras enfermedades autoinmunes, una dieta estricta sin gluten y el manejo adecuado de la enfermedad pueden mejorar las posibilidades de concebir y llevar adelante un embarazo saludable.
Enfermedades tiroideas: un factor relevante
Las enfermedades autoinmunes de la tiroides, como la enfermedad de Hashimoto (hipotiroidismo) y la enfermedad de Graves (hipertiroidismo), también tienen un impacto considerable en la fertilidad. En ambos casos, el sistema inmunológico ataca la tiroides, lo que lleva a un desequilibrio en los niveles hormonales que regula el ciclo menstrual y la ovulación. Las mujeres con trastornos tiroideos autoinmunes pueden experimentar ciclos menstruales irregulares, lo que dificulta la concepción.
Sin embargo, una vez que se estabilizan los niveles hormonales mediante el tratamiento adecuado, la fertilidad puede mejorar significativamente. Es esencial que las mujeres con problemas tiroideos trabajen de cerca con su equipo médico para garantizar que sus niveles hormonales se mantengan dentro de los rangos normales, lo que facilitará el embarazo.
Epilepsia: un factor a considerar en la fertilidad
La epilepsia, aunque no siempre considerada en la misma categoría que otras enfermedades autoinmunes, puede tener un impacto significativo en la fertilidad de las mujeres. Algunos estudios sugieren que los anticonvulsivos utilizados para controlar las convulsiones pueden afectar la ovulación y la fertilidad. Además, las mujeres con epilepsia pueden ser más propensas a problemas hormonales que afectan el ciclo menstrual.
Sin embargo, con el tratamiento adecuado y el control de la epilepsia, muchas mujeres logran concebir sin mayores dificultades. Es esencial trabajar con un equipo médico que supervise tanto el tratamiento anticonvulsivo como la salud reproductiva.
¿Es posible concebir con enfermedades autoinmunes?
Sí. Si bien las enfermedades autoinmunes pueden complicar el proceso de concepción, no significa que la fertilidad esté necesariamente pérdida. Con el tratamiento adecuado, el control de la enfermedad y la asistencia médica especializada, muchas mujeres logran concebir y llevar adelante un embarazo. Técnicas de reproducción asistida, como la fertilización in vitro (FIV), también pueden ser una opción eficaz para las mujeres que enfrentan dificultades para concebir debido a estas condiciones.
Las enfermedades autoinmunes pueden presentar desafíos adicionales para las mujeres que desean tener hijos, pero con un diagnóstico temprano y un manejo adecuado de la condición, las posibilidades de concebir y llevar adelante un embarazo saludable pueden mejorar considerablemente. El apoyo médico y los tratamientos adecuados son fundamentales en este proceso. En Fertivida, entendemos los retos únicos que enfrentan las mujeres con enfermedades autoinmunes en su camino hacia la maternidad, y estamos comprometidos en brindar un enfoque integral y personalizado para cada caso.
